Ser alcanzado por un rayo es una probabilidad latente, sin embargo, pocos creen que esto les pueda ocurrir alguna vez en su vida.

Al año, en el mundo son muchísimas las personas alcanzadas por un rayo o heridas por su cercanía. ¿Sabías que una de las acciones básicas para evitar que esto te pase es que no laves platos o tomes un baño mientras se produce una tormenta eléctrica?

Primero entendamos cómo se forma una tormenta eléctrica. Las altas temperaturas del ambiente y la humedad crean grandes cantidades de aire húmedo que asciende a la atmósfera. Es ahí donde puede formarse una tormenta eléctrica.

Las nubes contienen millones de gotas de agua y hielo. Cuando éstas interactúan se generan los rayos. Las gotas de agua que ascienden chocan con las gotas de hielo que caen, pasándoles una carga negativa y quedándose ellas con otra positiva.

En una tormenta eléctrica, las nubes separan las cargas positivas y negativas para crear enormes separaciones de carga dentro de ellas. Cuando las nubes de tormenta se mueven sobre la Tierra, generan una carga opuesta en el suelo, y esto es lo que atrae un rayo hacia abajo.

La tormenta eléctrica quiere equilibrar sus cargas, y lo hace descargando entre regiones positivas y negativas.

Por qué es peligroso bañarse durante una tormenta eléctrica

En el caso de que caiga un rayo en tu casa, la electricidad buscará las zonas ideales para propagarse, como pueden ser las cañerías o cables de metal. La ducha ofrece ambas cosas (agua y metal), por lo que es un camino ideal para que la electricidad siga.

Por ello es que no es nada aconsejable bañarse cuando hay una tormenta eléctrica, porque corrés el riesgo de ser presa fácil de los rayos.

Esto también aplica para actividades cotidianas como lavar los platos: al haber tuberías cerca, las probabilidades de que la electricidad se conduzca a través de ella aumentan.

Igualmente es recomendable evitar apoyarse en paredes de hormigón, ya que éstas tienen un refuerzo de metal que, como ya vimos, se vuelve en un transporte para la electricidad.

Otro consejo es evitar el uso de electrodomésticos, ya que los rayos también pueden conducirse a través de los cables de metal. Esto incluye aparatos tan variados como computadoras, lavadoras, secadoras, estufas o lavavajillas. 

Los rayos pueden viajar a través de sistemas eléctricos y sistemas de radio y televisión.

Aunque en realidad las probabilidades de que un rayo alcance tu hogar son escasas, siempre es mejor prevenir antes que lamentar.

Fuente: Muy Interesante