"Desde el momento de decidir hacer la muestra, poco a poco fue creciendo más y más mi movilización interior. Las casas simbolizan algo muy fuerte e importante para mi vida y quizás de igual modo para la vida de muchas personas; sobre todo cuando el sueño de la casa propia en inalcanzable. Al pasar frente a ellas, algo me hizo girar la cabeza y mirarlas, prestarles atención y escucharlas. Si, escucharlas porque parecen llamar, hablar e invitar a reflexionar, a pensar, a sentir,y también a intuir y evocar historias; muchas historias..."

"El progreso convoca a exterminarlas y en su lugar propone plantar nuevos ladrillos modernos y rentables. ¡Eso me apena tanto!. Quisiera que se encuentre una manera de progresar sin destruirlas, preservando todo o al menos una parte de sus muros, como testimonio y homenaje a las personas que allí vivieron y a las historias de vida que aún habitan etéreamente", expresa la artista rafaelina en un poema dedicado a las antiguas construcciones que en muchos casos ya han sido declaradas patrimonio histórico y que podemos apreciar a través de sus cuadros expuestos en "Jalito Bar" (Rivadavia 115) desde este fin de semana.

Marta Álvarez junto a amigos invitados.