Para poder hacer los trabajos finales de la reparación del caño averiado del acueducto, Aguas Santafesinas debió cortar el flujo de agua en la zona crítica y por lo tanto en toda la ciudad de Rafaela. Una vez solucionado, el suministro podrá ser restablecido, pero tomará unas horas hasta que toda la ciudad pueda tener presión de agua con normalidad. Por eso se tomó la decisión de abastecer a los puntos mas indispensables como hospitales y escuelas, con camiones cisterna que toman agua directamente de la planta potabilizadora.
Junto al camión de ASSA, colabora un vehículo de la zona, que gentilmente ofrece sus servicios para abastecer a la ciudad.
Se espera que durante el final de este jueves el suministro se normalice, siendo total el día viernes. Estos hechos sirven para entender la magnitud de esta obra de red de agua, que ya lleva varias décadas en su sitio, y del esfuerzo del personal especializado, que tuvieron que luchar contra kilómetros de barro para poder llegar hasta el lugar.