Se establece el servicio comunitario como posibilidad -a criterio del Juez de Faltas- para complementar o sustituir las penas dispuestas en la normativa local. Se trata de prestaciones de carácter personal no remuneradas, a favor de instituciones públicas o de fin público, ubicadas dentro del ejido urbano de Sunchales. Estas actividades se llevarán a cabo en jornadas dentro de un período distinto a las labores que representen la principal fuente de ingresos para la subsistencia del infractor y de su familia, sin que puedan exceder de la jornada extraordinaria determinada por la Ley Nacional del Trabajo. Por ningún motivo, el servicio comunitario se desarrollará en forma que resulte degradante o humillante para el infractor, ni que implique un riesgo a la integridad física del mismo.
“Estos artículos hacen énfasis en la responsabilidad social. No solo una persona que no pueda pagar una multa tiene que incorporarse al servicio comunitario, también puede hacerlo aquella persona que sí puede acceder a pagarla, para que a través de distintas actividades se acerque a una realidad que quizás en otro contexto no viviría”, afirmó la concejala Cecilia Ghione.
