Al ingresar al supermercado nos encontramos con un estante que contiene llamadores electrónicos. Lo que debemos hacer es tomar uno y continuar con nuestras compras normalmente.
Unos minutos antes de terminar nuestra compra, tomamos el llamador y lo colocamos debajo de uno de los tantos lectores que hay distribuidos por todo el súper.
A continuación nos dará opciones a elegir dependiendo de la cantidad de productos que haya en nuestro carro.
En nuestro caso elegimos la opción "hasta 20 unidades" que vendría a ser la modalidad de caja rápida.
Solo nos queda aguardar nuestro turno. El llamador nos va a avisar prendiendo luces rojas y vibrando, y en su pantalla aparecerá el número de caja al que debemos ir.
Nos ha tocado la caja nº 18. Vale aclarar que debemos asistir rápidamente a esa caja ya que de lo contrario nuestro turno pasará y le tocará a otra persona. De todos modos, si nuestro turno pasa, el llamador nos volverá a avisar cuando se ha desocupado la caja nuevamente.
Otra de las cosas a tener en cuenta son las pantallas que hay distribuidas en todo el súper, que nos indican la demora que hay en cada caja.
Esto nos va a servir para saber cuando sacar el turno con el llamador ya que si hay mucha demora, debemos sacar el turno unos cuantos minutos antes de terminar la compra.
Al llegar a la caja que nos ha tocado, primero debemos entregar el llamador a los cajeros ya que es la única forma en que tienen de corroborar que nuestro turno es válido.