"¡Y listo! ¡A rodar!": Sturzenegger celebró la desregulación del transporte público

El Gobierno flexibiliza normas en transporte público: menos burocracia y más autonomía para las empresas. Prometen mayor oferta y competencia en beneficio del usuario.

Sociedad10 de diciembre de 2024Carlos MondinoCarlos Mondino
Imagenes Región Oeste
Desregulación del transporte automotor de pasajeros de larga y media distancia.

La desregulación del transporte automotor de pasajeros de larga y media distancia ya es una realidad. A través de la Resolución 57/2024, publicada en el Boletín Oficial este martes, el Gobierno nacional introdujo cambios significativos que transformarán el sector.

La medida, impulsada por la Secretaría de Transporte del Ministerio de Economía en conjunto con el Ministerio de Desregulación y Transformación del Estado, busca modernizar un sistema que llevaba más de tres décadas sin cambios sustanciales.

Un sistema más ágil y digital

La nueva normativa elimina las complejas estructuras previas, caracterizadas por permisos rígidos y trámites burocráticos extensos. Según explicó Franco Mogetta, titular de la Secretaría de Transporte, el cambio "moderniza un régimen anticuado, simplificando procesos para empresas y transportistas".

Ahora, los registros serán online y gratuitos mediante la plataforma Trámites a Distancia (TAD), permitiendo a los transportistas cargar información relevante de manera inmediata y sin costos asociados.

Entre las novedades se destaca la creación del Registro Nacional de Transporte Automotor de Pasajeros (RNTAP), un sistema unificado que centraliza todos los datos y requisitos necesarios.

Los transportistas que operen actualmente dispondrán de 60 días para actualizar su información en este nuevo registro, mientras que los nuevos operadores deberán completar formularios específicos y cumplir con requisitos técnicos como pólizas de seguros y la revisión técnica de sus vehículos.

Mayor autonomía para las empresas

Uno de los pilares de esta desregulación es la posibilidad de que las empresas definan libremente recorridos, itinerarios, precios, y modalidades de los servicios que ofrecen.

Esto representa un giro radical respecto al modelo anterior, donde los ajustes en parámetros operativos, como frecuencias o paradas, podían tardar hasta un año en ser aprobados.

Ahora, los transportistas sólo deberán notificar modificaciones con 15 días de antelación.

La flexibilidad regulatoria promete fomentar la competencia, lo que podría beneficiar directamente a los pasajeros con tarifas más accesibles y una mayor diversidad de servicios disponibles.

Garantías en seguridad y calidad

A pesar de la desregulación, el Gobierno asegura que se mantendrán estrictos estándares de seguridad vial y calidad. La normativa exige el cumplimiento de las revisiones técnicas vehiculares y los requisitos de accesibilidad e higiene para los diferentes tipos de vehículos.

Además, los transportistas registrados podrán ofrecer servicios internacionales ocasionales en circuito cerrado, ampliando aún más las oportunidades de negocio en el sector.

Te puede interesar
Lo más visto

Recibe las noticias más importantes en tu email